«Despeja las dudas querida. No he venido por tu piel, ni por tu mirar o tu sonrisa. Vacuas encuentro a las odas y las canciones de poetas y autores, intentando seducir tu amor en éste mundo. No me alimento de amores, ni de corazones apasionados. Tampoco son de mi interés – por ahora – la lujuria y perversión que usualmente se enmascaran en los corazones de los hombres, para disfrutarte secretamente en sus sórdidos deseos. No querida. No soy como ellos. No me alimento de suspiros al viento, ni de lágrimas forjadas en el nombre del amor. He venido por tu mente y tu alma. Rozaré lo que la piel no puede sentir. Exaltaré lo que hace vibrar al corazón, hasta paroxismos envueltos en taquicardias. He venido para hacerte perder la noción del tiempo y el espacio. Ese es mi interés: poseerte completa, sin excusas ni maquillaje. Envuelta sin ropas, desnuda en el alma. Despeja tus dudas, porque he venido a llevarte – a través de lo desconocido – a tierras prohibidas y sin nombre, para que abras las alas y no dejes de volar.»

© Lᴀʀɴ Sᴏʟᴏ
Lima/Perú • 01º/feb./2017