«De pólvora envenenada
y saliva ardiente de pecado,
has escrito mi nombre en tus labios.

Proyectiles de gemidos desbordados
atraviesan lo que queda de mi alma,
fusilando a mi lógica y mi control.

Contraataques de orgasmos,
en guerra placentera sin tregua,
pero con refugio en nuestros cuerpos.

Caigamos inertes en este campo de sábanas
por disparos de prohibiciones pactadas,
hasta que nos derrote el exceso de deseo.»

© Lᴀʀɴ Sᴏʟᴏ
Lima/Perú • 09/mayo/2017 



Comentarios

Entradas populares