«Juega la Providencia,
como niña traviesa,
atando el delicado lazo
que sostiene el filo desenvainado
sobre mi impía cabeza.

Danza coquetamente,
con mueca de mujer traviesa,
mientras lanza susurros al aire.
acariciando al péndulo que acrecienta
el hambre y la sed del fiero acero.

Callado y expectante,
siento el vaivén de la lámina,
cortando el viento sobre mi.
Basta una palabra, o un silencio.
La espada clama por una acción o una omisión,
mientras los segundos se vuelven eternos.

He pagado mi apuesta a Dionisio,
sentándome en el lugar de Damocles.
Ante una vida eterna sin ti,
prefiero una muerte súbita contigo.
Decisión ciega, cuando es ahora tu ausencia
el único castigo para el alma del Caído.»

© Lᴀʀɴ Sᴏʟᴏ
Lima/Perú • 03/mayo/2017



Comentarios

Entradas populares