«Se esparce segundo a segundo,
acortando distancias y horizontes.
Recuerdo que discurre entre las venas
y se engarza con fiereza en el corazón.

Se torna imborrable la huella de la voz
en cada rincón de la insana cordura.
Deshace al alma en sublime anhelo 
entre los océanos de la nada y el tiempo.

Tormentosa tentación 
que arranca los ojos a la razón, 
mientras el pulso delata el deseo 
por nuevo encuentro.
Nada es suficiente para aplacar 
la sed calcinante del Caído.»

© Lᴀʀɴ Sᴏʟᴏ
Lima/Perú • 23/mayo/2017



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