«Mar de incertidumbre ante nuestros ojos. No hay futuro prometido. No nos ofrecimos eternidad, porque sabemos que es efímera. Sólo tengo tu mano aferrada a la mía, viviendo cada segundo del día. Ironía del destino: somos dos corazones de tiempos distintos. Somos los sobrevivientes de nuestros propios laberintos, y así, quizás aún sangrantes, quizás aún destruidos, recogimos nuestras cenizas, y nos aspiramos mutuamente, en perfecto silencio. Las palabras han huido, porque entre nosotros, la ausencia de vocablos no es un defecto, sino la firma clara de que el latido va al unísono, mientras el tiempo se diluye, y escapa a nuestros sentidos. Somos un encuentro furtivo. El roce de piel con ojos cerrados. La caricia que grita mientras el beso enmudece nuestros labios. Somos los últimos vampiros en éste mundo de prejuicios y caretas, que han cruzado camino a través de las eras, y seremos, sin dudar, la más bella ironía del destino.»

© Lᴀʀɴ Sᴏʟᴏ

Lima/Perú • 10/abr./2018