[ intento de soneto ]

«Lo convertiste en visitante diurno
desde el amanecer hasta el ocaso,
y entre el café, y el trabajo, das repaso
al sabor de su beso taciturno.

Lo convertiste en tu amante nocturno
y su nombre lo hiciste marcapaso,
mientras tu imaginar concede paso
al libido del hijo de Saturno.

Tu piel se eriza al concebir su tacto
como preámbulo a tu húmedo ensueño,
que se delata en un labio mordido.

Bajo las sábanas signas el pacto,
dándole potestad de ser tu dueño
al deslizarse lento, tu gemido.»

© Lᴀʀɴ Sᴏʟᴏ
Lima/Perú  • 16/jul./2018



Comentarios

Entradas populares