«Me levanté y, con desdén en las yemas, asesiné a mi reinante sentimiento. Capitulé ante tus ojos, para tu ingrata sorpresa. Dejé, por insana diversión, que me guiara el torpe corazón y me dividiste en dieciséis piezas, sacrificando mis insomnios para darle alas a tus movimientos cual devotos peones ciegos. Te permití usar mis brazos como incólumes torres donde solías hallar refugio a tus tormentos. Sonreía viendo cómo usabas mis anhelos, cual alfiles que despejaban toda nube gris que entristeciera tu firmamento y pequé de malgastar mi bravía caballería por tan sólo uno de tus preciados besos. Más obviamente nunca iba ser el rey al cual tú te dedicarías ¿Entregarte a un Caído? Jamás fue parte de tu estrategia ¡Tamaña herejía! Hubiera implicado arriesgarte demasiado y salir herida; sólo fui el cercano instrumento para que conquistaras otro reino donde los juglares puedan alabar tu sonrisa divina, mientras dejabas sus románticos sueños hechos trizas. Considéralo un salomónico empate: también serviste para alegrarle a un demonio sus umbríos días.»

— Đᴇsᴠᴀʀɪᴏʂ ᴅᴇ ᴜɴ Ḁɴɢᴇʟ Ͼᴀɪᴅᴏ —

© Lᴀʀɴ Sᴏʟᴏ |Ͼʜʀɪʂᴛᴏᴘʜᴇʀ Ɖʀᴀᴋᴇ|
Lima/Perú  • 09/oct./2019



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