«Aún nos debemos un café,
para enredarnos entre miradas
sinceramente cómplices…,
hipócritamente silenciosas.

Todavía nos debemos una tarde
para que se borren nuestros nombres
cuando se embriaguen del oleaje
desteñido en playa anónima.

Todavía nos debemos una sombra,
sincronizar el eco de los pasos, 
paladear picarescas sonrisas,
detener el tiempo al final de mayo.

Aún me debes el carmín de tus versos.
Todavía te adeudo tus horas de sueño.

Aún nos debemos un café…
Un paseo…
Un ocaso…
Una luna…
Un paradisiaco infierno…
Calcinarnos la boca con mutuo veneno.»

© Lᴀʀɴ Sᴏʟᴏ
Lima/Perú • 06/mayo/2021